La inversión que está por concretarse se enmarca en el PERTE de microchips, un proyecto de recuperación impulsado por el Gobierno.

El proyecto contará con una mayor inversión pública capaz de movilizar alrededor de 12.000 millones de euros.

De esta  manera, España se está convirtiendo en un protagonista importante en el cumplimiento de la meta de la Unión Europea de alcanzar el 20% del mercado mundial de chips para 2030.

El PERTE de microchips ya cuenta con aprobación y con reformas, hoja de ruta e incentivos para atraer talento en este campo y consolidar el sector en España.

El Govern por su parte, señaló que el proyecto cuenta con el apoyo de Acció, agencia para la competitividad del Departament d’Empresa i Treball.

También recordó las inversiones recientes en la línea de la de Cisco, como la recién anunciada por parte de la empresa estadounidense de semiconductores Monolithic Power Systems.

La compañía pondrá en marcha su principal centro de I+D de Europa en L’Hospitalet de Llobregat, así como el proyecto de Intel en el Barcelona Supercomputing Center, BSC-CNS, con la finalidad de abrir un laboratorio de microchips.

 

¿Qué es el PERTE de microchips?

La sigla hace referencia al Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica, PERTE, de microelectrónica y semiconductores.

Desde octubre pasado inició su primera convocatoria de ayudas con gran éxito, ya que fueron y son muchas las empresas interesadas en el programa con gran presupuesto asignado: 12.250 millones de euros.

Bajo este contexto, tanto desde el mundo empresarial, científico y del Ejecutivo, existe un gran interés por movilizar esta inversión pública.

Inicialmente, el Gobierno prevé destinar para el PERTE Chip 2023 la cifra de 1.150 millones de euros, de los cuales un tercio (350 millones) serán destinados a ayudas a empresas, sociedades privadas y comunidades autónomas.

A través del proyecto PERTE España entra a competir en Europa por atraer inversiones y el mejor talento humano.