(Insostenible si no cambiamos el sistema y si no favorecemos la natalidad de una vez y en serio. Estamos siendo esclavizados o poco falta. Cuca de Llum )
A pesar de las reformas aprobadas por el Gobierno, no se consigue eliminar la brecha entre ingresos y gastos, continúa el desequilibrio de las cuentas y en 2015 hará falta 8.500 millones de euros del Fondo de Reserva para pagar a los jubilados
Isabel Ordóñez
¿Se
puede evitar el colapso del sistema público de pensiones con las
últimas reformas? Contestar a esta pregunta no es tarea fácil. De hecho,
hay cuatro obstáculos que impedirán que salga bien: el desajuste entre lo que se cotiza y lo que se cobra, la escasa productividad, el desempleo y la insuficiente natalidad.
Aunque
las reformas propuestas y aprobadas por el Gobierno apuntan hacia un
aumento de la sostenibilidad del sistema, lo cierto es que aún distan
mucho de poder conseguir ese objetivo.
Cabe
reconocer que la reforma de 2011 ayuda a contener el gasto en
pensiones, al aumentar progresivamente la edad de jubilación de 65 a 67 años y el número de años incluidos en la cuota de 15 a 25. Pero los resultados tardarán en observarse porque "su implementación está diferida en el tiempo", como indica el Informe Mensual de "la Caixa" de enero de 2015.
Al
mismo tiempo, la reforma de 2013 también introdujo elementos "que
deberían ayudar a reequilibrar las cuentas de la Seguridad Social", al
añadir un factor de equidad generacional que tiene en cuenta la
esperanza de vida en el cálculo de las pensiones (se implementará a
partir de 2019), recuerda el informe.
También
añade un factor de revalorización anual de las pensiones que empieza a
aplicarse por primera vez en 2015. Este índice modula la revalorización
de las pensiones en función de los flujos presupuestarios de la
Seguridad Social y el ciclo económico, buscando un equilibrio a medio
plazo entre ingresos y gastos, aunque establece también un incremento
mínimo (0,25%) y uno máximo (inflación +0,5%).
El envejecimiento, factor clave
Sin embargo, el estudio del Informe Mensual de "la Caixa", que analiza "la sostenibilidad del sistema de pensiones", viene a constatar que este sistema público de mantenimiento de las retribuciones de los jubilados tiene ante sí un futuro prácticamente insostenible.
Esta
situación viene dada tanto por el descenso de las cotizaciones
sociales, de carácter más coyuntural, como por el aumento del gasto en
pensiones, más estructural y debido tanto al mayor número de
pensionistas como al aumento del importe de la pensión media, señala el
estudio de "la Caixa".
Tanto es así que el progresivo envejecimiento de la población se ha convertido en un factor clave para entender que el actual sistema de pensiones es a todas luces insostenible.
"Una muestra del envejecimiento de la población española es que el número de pensionistas ha pasado de 7,7 millones en 2008 a 8,4 en el tercer trimestre de 2014", señala el informe.
"Asimismo,
el importe de la pensión mensual media aumentó de 725 euros en 2008
hasta 877 euros en 2014, superando los 1.000 euros en el caso de las
pensiones de jubilación contributivas", como se puede observar en el
siguiente gráfico, reproducido a partir de los datos del Informe
Mensual.
Evolución prevista
Al
mismo tiempo, el estudio advierte de que "la evolución prevista a medio
plazo (2015-2020) de ingresos y gastos de la Seguridad Social muestra
cómo la brecha debería cerrarse gradualmente. Los mecanismos adoptados
permiten, pues, un cierto ajuste", según indica este segundo gráfico del
informe.
Sin embargo, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF),
que tiene por objeto velar por la sostenibilidad de las finanzas
públicas, "ha dado un toque de alerta sobre las previsiones de ingresos
del Gobierno para dicho período, que encuentra demasiado optimistas".
Además,
"su cálculo, que modeliza la evolución de las cotizaciones sociales así
como el número de pensiones y la tasa de sustitución entre pensiones
salientes y entrantes, revela necesarios unos ingresos adicionales
equivalentes al 1,0% del PIB anual durante 2015-2020".
La brecha se mantiene
Así
las cosas, aunque las reformas del Gobierno pueden ayudar a la
sostenibilidad del sistema de pensiones, "la brecha entre ingresos y
gastos no se elimina completamente", insiste el estudio.
"El
Gobierno prevé conseguir más ingresos con la introducción de las
retribuciones en especie, el nuevo sistema de liquidación directa
(CRETA) y la lucha contra el fraude (medidas previstas en los
Presupuestos de la Seguridad Social para 2015)", añade.
Pero,
lo cierto es que "el desequilibrio de las cuentas de la Seguridad
Social ha ido aumentando desde 2010. De hecho, se prevé que la brecha
entre ingresos y gastos sea del 1,0% del PIB en 2014".
El
estudio concluye recordando que el Gobierno en 2014 ya retiró 14.000
millones de euros del Fondo de Reserva de la Seguridad Social "para
hacer frente al pago de las pensiones, y prevé en los Presupuestos de la
Seguridad Social utilizar 8.500 más en 2015".