Sr. Director de L´Osservatore Romano
Via del Pellegrino 00120 –
Città del Vaticano
Sr. Director,
Me gustaría escribirle en su bonita lengua italiana, pero espero que con el castellano y el catalán, lenguas también latinas, no tenga problemas para entendernos. Ante todo ruego me disculpe por mi atrevimiento al escribirle y disponer de su tiempo. Ayer les envié información sobre la gran movilización que tiene lugar en Barcelona en defensa del Templo de la Sagrada Familia, seriamente amenazado por las obras del túnel del tren de alta velocidad AVE.
La sociedad civil está muy preocupada y prácticamente conmocionada ante la decisión tan irrazonable de construir semejante túnel por el subsuelo de Barcelona, obra que puede provocar el desplome de la Sagrada Familia, el edificio de La Pedrera, también de Gaudí, y que pone en peligro las viviendas y comercios de más de 53.000 barceloneses. Por otro lado, existen tres itinerarios alternativos más seguros y más económicos, por lo que este túnel representa también una dilapidación de la hacienda y los caudales públicos además de ser una obra prescindible.
Hemos contactado con Instituciones y Periódicos de todo el mundo, la UNESCO, por ejemplo, que ha declarado a la Sagrada Familia edificio Patrimonio de la Humanidad, está especialmente involucrada en que se opte por otro itinerario. Si hemos decidido dirigirnos a Uds. es porque para nosotros, los católicos, L´Osservatore Romano no es un periódico más, es un periódico muy especial porque pone en comunicación a la Iglesia Católica con el resto del mundo, tanto a los laicos como a los católicos practicantes. La Sagrada Familia es un Templo católico, sufragado por católicos, diseñada por un arquitecto católico, Gaudí, practicante fervoroso, que personalmente impulsó su construcción a partir de 1883. Desde entonces los barceloneses siguen haciendo donativos, tanto los ricos como los que no lo son a fin de poder continuar esta construcción inacabada y consideran a la Sagrada Familia “su Templo”, al que aman y del que se sienten intrinsecamente responsables. Por este motivo consideramos que la Iglesia Católica, el Vaticano y L´Osservatore Romano comparten muy especialmente esta responsabilidad respecto del Templo de la Sagrada Familia junto con los barceloneses, con la Humanidad de la que es patrimonio y con todos los fieles de la Iglesia Católica y de la Cristiandad de la que es Patrimonio también. Se trata de un templo ecuménico.
Sin embargo, los barceloneses católicos se sienten relativamente abandonados por la Madre Iglesia, las autoridades civiles nos han tratado injustamente pero esperábamos, nos hubiese gustado y también habriamos agradecido un apoyo más evidente por parte de las autoridades eclesiásticas. Al fin y al cabo se trata de un Templo católico al que acuden seres humanos de todo tipo y de todas las creencias, a rogar y a agradecer, a meditar y a admirar la grandiosidad de la obra, el templo proporciona paz y seguridad a unos, descanso a otros… , el túnel del AVE, en cambio no es imprescindible, existen opciones menos peligrosas, más económicas y más idóneas para Barcelona.
Finalmente y como anécdota, podríamos recordar que en el año 452, en la ciudad de Mantua, el Papa León I el Magno fue al encuento de Atila rey de los hunos y le convenció de que no saquera Roma, personajes destructores y empresas temerarias hay muchas, Papas que las detengan hay pocos.
De nuevo pido disculpas por disponer de su tiempo y por esta carta tan “temeraria”, que en nombre de todos los colectivos que reclaman un itineraro humanamente justo para el tunel del AVE le enviamos.
Muy atentamente,
Junta Permanent en Defensa del Patrimoni de Catalunya.
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